Nuestra protagonista del primer libro de la Trilogía Vaion, Amarantha, es una joven chamana que se encuentra con un extraño Don. No elegí su nombre al azar.

La palabra Amah significa ‘madre’, en Asia significa ‘sirviente’ y para los taoístas es la ‘Reina Madre del Oeste’, también llamada Xi Wuangmu.

Según las antiguas creencias chinas, se decía que residía en un paraíso celestial en lo alto del Monte Kunlun, el eje del universo en la antigua cosmología china. Su dominio estaba lleno de criaturas mágicas, incluyendo criaturas míticas y melocotoneros que otorgaban la inmortalidad. ¿Os suena?

En sus primeras representaciones durante la dinastía Zhou, Xiwangmu era temida y respetada como un demonio caníbal con cabeza de tigre y cuerpo de leopardo. Sin embargo, durante la dinastía Han, su imagen cambió dramáticamente. Se la empezó a representar como una diosa hermosa, benevolente e inmortal. Se convirtió en la guardiana de los secretos de la inmortalidad y la guía de los héroes y las almas virtuosas en su búsqueda de la vida eterna.

En su jardín celestial crecía un melocotonero mágico que florecía solo una vez cada tres mil años. Comer uno de estos melocotones concedía la inmortalidad. En algunas leyendas, se dice que ella celebraba un banquete cada tres mil años, que se conocía como el «Banquete de los Melocotones», durante el cual distribuía los duraznos de la inmortalidad a los invitados dignos.

Por otra parte, la palabra Amarantha, o Amaranta, denomina una flor, una flor que no pierde brillo ni color. Se asocia con la vitalidad, la fuerza y la inmortalidad. Otra referencia a las características de la aventura de Amahrantha en la novela.

Escogí una mezcla de ambas: Amah + Amarantha, para describir a nuestra protagonista, nuestra chamana. Su instinto protector con los suyos y lo que consiguió después, parecía bastante apropiado.

Barajé otros nombres, pero estoy satisfecho con el resultado. Aunque, no podemos negar, dificulta que los lectores encuentren el libro, entre las muchas variantes de escribirlo. Las dos haches nos han ocultado estupendamente. 😊